Las caminatas de montaña no solo ayudan a la salud física, sino también a la salud respiratoria. Al subir la montaña, se quema una gran cantidad de calorías, lo que hace que el corazón y los pulmones necesiten más energía que normalmente. Es natural que se quede sin aliento y se sienta cansado durante este proceso. Sin embargo, esto le ayudará a desarrollar una función cardiovascular sana.

Para la salud del corazón, es bueno desarrollar el hábito de controlar el pulso durante una caminata de montaña. Si su corazón late con fuerza o siente dolor en el pecho, las axilas o los hombros en una colina empinada, su corazón puede estar bajo presión. También es necesario tener cuidado con un latido irregular del corazón. A medida que envejecemos, es más probable que el corazón, que ha estado funcionando sin descanso durante toda la vida, se vea afectado. Por eso es importante controlar la frecuencia cardíaca mientras se practica el senderismo.

Para mejorar la función pulmonar, es bueno prestar atención a la respiración. Incluso en una pendiente moderada del 15%, se queman tres veces más calorías que al caminar en terreno llano, lo que hace que la respiración se vuelva más rápida. En este caso, si no exhala todo el aire y deja algo antes de inhalar de nuevo, no se presionarán los pulmones y la circulación del aire será más eficiente. Además, la respiración diafragmática natural durante la escalada presiona el diafragma y envía aire a las partes más profundas de los pulmones, lo que ayuda a mejorar la función pulmonar.

Como puede ver, el senderismo tiene el efecto de fortalecer los músculos respiratorios y mejorar la función pulmonar. Al igual que existe el concepto de edad pulmonar, la capacidad respiratoria disminuye con la edad, por lo que es necesario prevenir y controlar este proceso mediante la práctica regular del senderismo. Especialmente si se combina con dejar de fumar, los efectos serán aún mayores.

En general, los beneficios de la resistencia y la mejora de la función respiratoria que se obtienen con el senderismo serán de gran ayuda para vivir una vida saludable. Es importante elegir rutas de senderismo adecuadas a su resistencia física y practicarlas de forma regular. Tampoco se olvide de mantener sus niveles de energía tomando suficiente agua y refrigerios. El senderismo es un ejercicio de cuerpo completo y una forma de mejorar la capacidad pulmonar, por lo que si lo practica con regularidad en su vida diaria, podrá disfrutar de una vejez saludable.